Para mí, la fotografía con niñ@s es algo mágico.
Llevo más de 15 años trabajando con ellos y nunca dejan de sorprenderme, su inocencia y espontaneidad es algo que me fascina.
La Comunión es el paso de la niñez a la adolescencia. Es un momento muy importante en la vida de cualquier niñ@, y hay que inmortalizarlo para siempre. Verás como a partir de ahora, sus caritas empiezan a cambiar ya que dejan de ser niñ@s para dar paso a la pre – adolescencia.
Las sesiones de Comunión, siempre las planteo como un momento para vivir una experiencia inolvidable. Por lo que a parte de tener unas fotos de cuento de hadas con sus trajes de Comunión, también me gusta hacer fotos más informales, con otro tipo de vestuario para poder pasarlo bien sin preocuparnos de si se mancha o se roza el traje.
De esta forma consigo que los niños y niñas sean ellos mismos y disfruten y pasen un rato muy divertido.
Aprovechamos a hacer fotos toda la familia, con los hermanos y padres, de este modo conseguiremos que todo quede inmortalizado para siempre.
¿Quieres que yo me encargue de capturar esos momentos únicos?
La Comunión es ahora, pero las fotos son para siempre.
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